¿Mujer del César o mujer de CiU?




No sé si le ha metido un gol a la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, o es que realmente es una ilustre iletrada de los que tanto abundan en nuestra política. Pero he aquí que una persona, Concepció Ferrer i Casals, con un amplísimo currículum político en CiU, tanto en lo local, lo provincial, lo parlamentario, lo interno en su partido, UDC, y en el parlamento europeo para, finalmente recalar en la Oficina del Defensor de Pueblo, para ocupar –por aquello de las putas cuotas– fue propuesta por CiU como Adjunta Segunda a la Defensora de Pueblo, al parecer, fundamentada en una inexistente titulación que le capacite para dictaminar sobre Derecho Constitucional, decida el último día posible, comunicarnos que no se adhieren a nuestra solicitud de amparo porque ya lo ha hecho el Gobierno de España, ignorando que, en ambos casos, las vías y motivaciones son bien distintas, a todas luces:





El nuestro, en amparo, y por el expolio o negación de nuestro derecho fundamental a participar en una decisión que constitucionalmente corresponde al pueblo español en su totalidad, y no a un colectivo más o menos numeroso de ellos.

El Gobierno de España, por impugnación, solicita su suspensión.


Me voy a esforzar a explicarlo en roman paladino, mientras que una visión más profesional sobre el asunto, se puede visualizar aquí:

http://plazamoyua.com/2013/04/25/la-mujer-del-cesar/
 

Personalmente, si llego a conocer que este tema cae en manos de alguien, colocado en un organismo tan necesitado de limpieza como el Defensor del Pueblo, por un partido secesionista, lo hubiera recusado. Porque, aunque sólo fuera por higiene democrática, esta señora, de ser realmente una demócrata, debería haber rehusado ver este asunto que tanto toca a sus personales sensibilidades. Una auténtica vergüenza.

Indudablemente, este personaje debe creer que todo el amplísimo currículum citado, le otorga unos ¿sólidos fundamentos en Derecho Constitucional?, que supuestamente haga olvidar que su formación académica, Licenciada en Filosofía y Letras (Sección Románicas) por la Universidad de Barcelona, carece de ellos.

Ya no hay tiempo para recursos. Ella, Concepció Ferrer i Casals, con su tardanza en contestar, parece haberse ocupado de ello. Así que sólo me queda lanzar unas preguntas a la Sra. Becerril:

¿Le han metido un gol o ha sido decisión suya que
Concepció Ferrer i Casals fuera la responsable de entender sobre nuestra solicitud?

¿Sabía Ud que la decisión sobre nuestra solicitud, recaería, o podía recaer, sobre una persona claramente contaminada por su pertenencia a una formación secesionista, CiU? (Y si no lo está, es lo de la mujer del César, que debería ser referencia del Defensor del Pueblo).

¿Considera Ud. que haber ignorado la procedencia de nuestra petición e ignorarla porque el Gobierno de España haya procedido, en su derecho a pedir la suspensión de los acuerdos, por vía que sólo le compete a dicho órgano, es la forma digna y transparente de actuar en este caso?

¿Cree Ud. que una persona con un amplio currículum de pertenencia a una partido secesionista –sin haberse separado públicamente de estos planteamientos–, es la idónea para entender de nuestra solicitud? 


¿Está Ud. dispuesta, Sra. Becerril, a sumir alguna responsabilidad por los hechos?



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