¡Lo vamos a hacer! (2)


Para que la sociedad civil pueda dar el golpe de mano necesario, la clave está en que tenemos que ser muchos los que les empujemos. 

¿Realmente somos tantos? 

Como citaba en la anterior entrada de esta serie, estoy convencido de que somos muchos más de los que, de momento, estamos en esto y, conforme la casta política persevere en su expolio de lo que es de todos los españoles, seremos cientos de miles y llegaremos a ser millones.

Por supuesto que no todo el mundo cabe en ese proyecto. A los instalados en la corrupción y en el clientelismo viviendo a pie de rey, de un sistema prostituido –PP, PSOE, etc.– y a los que se esfuerzan en romperlo para destruir España o, bien, para prostituirlo aún más –Bildu, ERC, PNV, CiU, etc.–, se han unido otros supuestamente regeneradoresUPyD–, que, pareciendo estar dispuestos a abanderar determinados cambios, a buen seguro, ninguno de ellos será de los capaces de erradicar la partitocracia y los privilegios de la casta política, justamente porque sus cúpulas o aparatos se encuentran muy a gusto dentro de la partitocracia, que critican de boquilla, disfrutando de sus privilegios, subvenciones, fundaciones, sobresueldos, "regalitos informáticos", etc.

Todos esos, junto con sus seguidores más sectarios, no caben o se auto excluyen, porque, pese a lo que tratan de aparentar, lo que en verdad les interesa tiene que ver más con la mamandurria que con la regeneración. Pero, afortunadamente, no ocurre lo mismo con gran parte de sus votantes de buena fe, que también van percibiendo la verdadera sustancia de la que está hecha esa casta política. Así que ya somos muchos, seremos más e, insisto, podemos ser cientos de miles o millones.

¿Quiere esto decir que somos los primeros en España? ¿Que hemos inventado esto?

Ciertamente no. El que la ciudadanía se agrupe en torno a un proyecto regenerador y transversal, alumbró dos proyectos anteriores con repercusión en la sociedad:  Ciutadans/Ciudadanos (liderado por Albert Rivera) y UPyD (el partido "de" Rosa Díez

Quizás nosotros, de forma similar al primero de esos dos proyectos, hemos surgido como un movimiento organizado desde la sociedad civil –concepto aún no en boga cuando se crearon esas dos formaciones– tratando de romper la partitocracia desde fuera, pero descubierta la solida brutalidad del blindaje tras el que, la casta política se han protegido de la sociedad –a la que dicen servir–, hemos llegado a la conclusión de que, muy a nuestro pesar, sólo desde dentro de ese coraza, se puede abordar la tarea de derribarla y regenerarla.


Por eso surge Sociedad Civil y Democracia, con el objeto de emprender las reformas necesarias que permitan que la sociedad civil española, junto con otros políticos que entiendan la verdadera naturaleza de la democracia moderna, participativa y representativa –no la restrictiva de la época helénica–, seamos capaces de construir un armazón sólido que preste cobertura a un nuevo sistema para que hombres y mujeres libres, e iguales en derechos en cualquier territorio español y ante cualquier autoridad de ellos, disfruten de una auténtica democracia, garante de:
  • La libertad de expresión.
  • La libre iniciativa individual o colectiva.
  • La propiedad privada.
  • La igualdad de oportunidades.
  • Una más reducida, sostenible y eficiente estructura administrativa del Estado que facilite, lejos de poner cortapisas, la iniciativa de los emprendedores y autónomos.
  • Unas suficientes y sostenibles prestaciones sociales, educación y sanidad de calidad incluidos. No para que los parásitos "expropien" los derechos de otros, sino para aquellos que realmente los precisen por circunstancias ajenas a su control o voluntad, por enfermedad, discapacidad o suerte.
 Una vez alcanzados esos fines, que sea el pueblo español, el que decida libremente sobre las diversas opciones ideológicas o, mejor, los diversos proyectos políticos que esa nueva clase política, entonces tan renovada como nuestra democracia, les proponga.

Por supuesto que nuestro empeño, es más que difícil de alcanzar. Estamos decididos, pero no somos tan estúpidos como para ignorar la inmensa tarea que nos ponemos por delante. Costará muchos sacrificios pero si estamos decididos a aparcar por un tiempo ciertos temas –importantes por supuesto, pero no imprescindible para abordar nuestro proyecto– y hacer todos, concesiones en temas menores, hasta haber logrado nuestro empeño común, tened por seguro que

¡Lo vamos a hacer!

(continuará)
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1 comentarios:

S. Guirao | 8 de septiembre de 2012, 13:18

Somos un país que ha aguantado 40 años al dictador, por lo tanto un país de cobardes por que en esa época si que los motivos eran lo suficiente para salir a la calle y comérselos.

Somos un pais de pillos, Xorisos (y no de la marca Revilla) que solo nos falta el parche para poder ser llamados piratas. Como dicen los Portugueses la diferencia entre Portugal y España es que en Portugal los Xoriseos por un favor se piden con la mano por delante y en España lo hacemos con la mano por detrás. Las pensiones de invalidez hace unos años se conseguían regalando buenos jamones al médico que te llevaba el caso (quien no tiene algún familiar, amigo o conocido que no esté en alguna de esas situaciones)

En un país con casi 5 millones de parados, que de esos parados, más de 2,5 millones estén trabajando y cobrando como lo podemos definir?

En un pais donde con 20 peonadas cobras 6 meses de paro, que estarán haciendo esos jornaleros esos 6 meses de paro (por que con 400 € apenas si se come)

Para poder hacer una verdadera regeneración democrática como la que pregonáis, primero debemos hacer una regeneración ciudadana profunda, por que los desmadres que realizan los políticos, si los ciudadanos estuviésemos regenerados, se denunciarían y sería imposible que se cometiesen, es decir cuantos problemas conocéis que alguien ha metido la mano en el cajón de una empresa privada (pocos, por que son fáciles de detectar)

Son muy pocas personas que anteponen los intereses generales de España, por encima de los suyos propios, por lo que esa regeneración es inviable y mucho más en estos momentos, en los que todo vale, en los que se han perdido los valores, lo honestidad, hasta la amistad en el más estricto sentido de la palabra. La mayoria de los jóvenes pasa su mayor parte del tiempo pensando en ser futbolista, ser cantante, ser famoso ya sea haciendo el mayor de los ridículos o algo ilicito y que le saquen por la tele. No se respeta nada, todo el mundo va a la suya, se pierde el sentido de la familia, y solo se vuelve si no tenemos donde caernos muertos.

Cualquier cosa que se crea como pudo ser el 15M, que podría haber sido el principio de esa regeneración, se convirtió en un auténtico desastre teledirigido políticamente y por que se convirtió en el botellón continuo en la calle, dando la imagen de lo que realmente somos.

En cuanto a las referencias de regeneradores que pretendieron ser tanto Ciutadans o Upyd (sin comentarios de esta aprovechada) son solo una cortina de humo para disfrazar a cuatro vividores como siempre. Aqui todo el mundo busca un SILLON para agarrarse a el y morir con su paga.

Los políticos prometen (Suarez con su puedo prometer y prometo o Rajoy con unos meses de gobierno y lo único que va a cumplir de su programa es quitar el aborto para las embarazadas con malformación de feto (por mucho que se empeñen un huevo no es una gallina ni lo ser hasta que no ha nacido) y todavía no ha dimitido.

Así que si queremos regeneración, primero comencemos por nosotros mismos y dejen de crear más de lo mismo, por que eso no solo no ayuda, sino que destruye y buen ejemplo lo tenemos en EEUU, solo dos partidos que alternan y funcionan en España tropecientos partidos y mira como nos va

En fím tenemos lo que nos merecemos y los ricos cada vez mas ricos y los pobres pronto ya no nos podrán quitar nada, por que el que nada tiene nada le pueden quitar (nuestra VOZ y SALIR A POR ELLOS! lo que hace el lobo cuando no le queda salida

Por último algo que decía mi padre que en paz descanse, en la CARCEL Y CON MIEDO NO SE PUEDE ESTAR por lo tanto a luchar por la dignidad, la honestidad, el respeto, el esfuerzo, ...,

Saludos
Sebas