Crónicas Carnavaleras

Dentro del más canalla espíritu carnavalero, voy a hacer uso del libertinaje reinante en estos días para lanzar esta crónica imaginaria.

Conocida es por todos la Gran Desbandada –aunque sigue el goteo o, mejor dicho, el reventón de la cañería–, que sufrió el partido con nombre de individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de individua que, ... ¡Coño! ¡qué jartá! ... todo por no mencionarla, por aquello de las denuncias que está dispuesta a sufragar de su propio bolsillo, ¡Pues se acabó! ¡No más miedo: la Chiringuitera!

Tampoco será desconocido que, desde entonces, han surgido múltiples intentos de organizarnos los diversos exmilitantes, algunos claramente alrededor de determinada ideología; otros echando manos de unas prisas, cuando menos, cuestionables; otros desde el aglutinamiento territorial; otros por aglutinamiento gastronómico; otros se han unido para no unirse a nada y que sean "los otros" los que se unan a ellos; otros no se han unido a nadie para que nadie le "una" con otros; otros han decidido retirarse consigo mismos a meditar al Himalaya o a los páramos castellanos; otros a echar peste sobre otros, etc.

La verdad es que de estos diversos grupos, muy pocos tiene visos de concretarse en algo permanente y productivo, democráticamente hablando. Pero sabiendo lo que a los españoles nos va el cachondeo, voy a realizar una crónica carnavalera de lo acaecido últimamente en nuestro expartido que por su interés social, voy a plasmar en este blog para conocimiento de todos, advirtiendo de que, por supuesto, poco, nada o mucho se parecerá a lo que realmente ocurrió.

Tras el congreso, y como medio de dar salida a las múltiples subvenciones, donaciones y –por supuesto– las cuantiosas cuotas de los cienes y cienes de millares de afiliados, la Divina ha decidido convocar un concurso de logotipos para la nueva imagen del partido. A tal fin, se decidió formar un jurado independiente –como todo en el pudridero– formado por los más prestigiosos profesionales. Para dar cumplimiento a tal requerimiento se decidió invitar al jurado a todos los miembros del Consejo Aplaudidómetro de Dirección, los Directores del Departamento de Mensajería, Transportes y Festejos, y a las Animadoras de Organización estos últimos colectivos, por estar integrados por cualificados profesionales del área del diseño, fueron los seleccionados por nuestros clarividentes dirigentes para que intervinieran en el diseño de nuestras papeletas electorales con tan brillantes –y difícilmente reconocibles– resultados, conocidos y alabados por todos.

Finalmente, tras un tiempo de espera, no se presentó ninguna propuesta pues, como viene siendo habitual en este partido, que de forma tan diferente hace política, los premios y homenajes los paga los premiados u homenajeados, salvo que sea la Divina. Si eso no fuera suficiente, los premios consistían en invitar a cenar a Popeyita Pelopincho o a Megalodón Colza, por lo que no es para extrañarse que tuvieran que declarar desierto el concurso por incomparecencia de valiente alguno. Hasta que un rotundo y tronante "¡COÑO!" de la Divina (lo pongo todo en mayúsculas porque el ¡coño! de la Divina es mucho más importante, como no podía ser de otra forma, que el ¡coño! dicho por cualquiera de nosotros), puso firmes a todo el personal de la sede y se procedió, tras epistolar recordatorio a todos los afiliados de que en los nuevos estatutos figura la obligación de cumplir las órdenes dadas por la dirección (Divina, por supuesto), se concedió un generoso plazo de dos días, después del cual, todos los afiliados, para no ser expedientados, presentaron sus propuestas.

Quedó citado el jurado de "cualificados" profesionales para a la selección de las mejores, entre la ingente cantidad de las ciento ochenta y siete recibidas. Tenían que ser ciento ochenta y nueve, pero como, no podía ser de otra forma, las normas son para "todos" y en ese "todos" no pueden ser incluidos la Divina ni el Filoinsultador por estar divinamente por encima de "todo" mortal.

En la primera ronda quedaron eliminados muchos trabajos y posteriormente, en la segunda ronda eliminatoria, quedaron seleccionadas ¡qué casualidad! sólo las propuestas que habían presentado los componentes del jurado ya que, lógicamente, no existía incompatibilidad alguna para ellos. Para la tercera ronda se habían afilado los cuchillos ya que todos pretendían que se eligiera su propuesta. Aquí cabe resaltar el papelón de pimentón del otro filosófo de la dirección, Der Kommissar (el que al menos hace acto de presencia en las clases por las que cobra), como viene siendo conducta habitual en él, se chivó de que una de las Animadoras de Organización, se había reído del adefesio de la Divina, con moño a lo Amy Winehouse, en la foto del acto de VOGUE. Por supuesto él no lo vió porque no estuvo presente, pero eso, la legitimidad de una prueba, no va a importar ahora cuando no ha importado nunca. Que una mala confirmación, no te estropee un magnífico expediente.

Pues así de tensas estaban las cosas, cuando entre fanfarrias y coros de ángeles, hace acto de presencia la Divina, después una sombra que para percibirla tenía que pasar dos veces por el mismo sitio, después un tapón andante, después nada.

"Cuanto me gusta la elección que habéis hecho", exclamó. Los aplaudidores, deseosos de realizar las labores propias de su inteligencia, aplaudir y aclamar, se miraron entre ellos, no para ver si el otro le explicaba el significado de esas "críptolianas" (por crípticas, no por cryptols) palabras, no era necesario entender para aplaudir, sino tratando de escrutar si era el momento de hacerlo o había que esperar más. Silencio que se puede cortar y, de nuevo fanfarrias al, aire "No podíais haber optado más que por estas dos propuestas", mostrando dos logotipos. Una de las "ostentóreas" Animadoras de Organización, dijo "Rosa, pero si esas no las hemos visto y no tienen ni el sello de haber sido entregadas en tiempo y forma." Mirada de fuego en la Divina, dando algunos codazos se le acerca Incoadora Benegá, la mira a los ojos con su cara de mofletes caídos, la besa y le toma por la mano colocándole sobre su palma un papel con con membrete del partido en el que sólo dio tiempo a leer "Por la presente ..." ya que la "ostentórea" comenzó a llorar, marchándose de la sala como alma que lleva el diablo.

La Divina, zanjó el incidente con una mirada de esas de "¡Ni una palabra más!", en travelling panorámico, añade "Un es de la hija de un intelectual de primer rango y la otra es de un amigo mío de toda la vida y ambas, están validadas en todos su trámites por mí". Estallido de aplausos, aclamaciones y vítores a la Caudilla que entre ellos, abandonó la sala seguida de la sombra, del tapón andante y de la nada. Veamos las dos propuestas:

La primera, presentada bajo el lema "Por aquí, a Benamejí" respeta el grafismo original pero incorporando un nuevo elemento al mismo, que le dota de un fuerte significante para todo aquél que hubiera creído en que el manifiesto fundacional, iba a inspirar la ideología, organización y conducta del partido.


La segunda versión, bajo el lema de "-180º", queda pendiente del ligero inconveniente de tener que cambiar el nombre pero que rápidamente se hizo con el apoyo de aquellos más aplaudidores pues resultaba ser más coherente con sus planteamientos personales. No en balde, uno de los que resta en el pudridero, elemento bien conocido por todos en su CEL, por trabajar menos que el sastre de Tarzán, le dijo a otro compañero: "llevo dos años invirtiendo veinte Euros mensuales en este partido y en las municipales será el momento de sacarles beneficio". ¡Toma sinceridad y transparencia!

Otro ligero cambio introducido es el color que desde el magenta (rosa) original, deriva hacia el morado. Uno de los miembros del jurado, al verlo, gritó: "¡Ese! ¡Ese es le color! Así me voy a poner con mi concejalía en la municipales: MORAO! ¡Ese es el color!"

Pero aquí no acababa la angustia de los componentes del jurado, quedaba cual elegir, por lo que, ante el pánico a no acertar con la propuesta que le gustara más a la Divina, tuvieran una visión reveladora de sus gustos. Así que llamaron a los coros y danzas de la sección masculina magenta. Los Magentazos Boys, y les solicitaron que entonaran el mantra "Hare Rosa, Hare Carlos" (que como todos saben, al igual que Krishna y Rama son las dos caras de Visnú, ellos son las dos caras de la Regeneración).


Finalmente, al no llegarles inspiración alguna, decidieron seleccionar las dos y que fuera la individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de individua que, a su vez, tiene nombre de partido con nombre de ..., la que decidiera cual y cuando usarlos, al fin y al cabo, el partido era suyo, su tesoooro, su chiringuito.

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3 comentarios:

Rocío Fondevila | 13 de febrero de 2010, 21:20

En vista de que me he perdido las chirigotas gaditanas, así como cualquier otro acto carnavalero, con tu aportación he podido cubrir mi cuota de carcajadas.

Por cierto, mi situación post-congresual no se encuentra en ninguna de las que mencionas en el tercer párrafo. A ver si soy capaz de encontrarle un nombre sonoro.

Besos, Juan.

Anónimo | 15 de febrero de 2010, 9:22

Jo, me gusta el nuevo logo del chiringuito. Por Dinero Nacemos. Pues sí. Seguimos sin saber por dónde se han quedado unos 1,7 millones de ingresos.

En fin, es alucinante ver con qué velocidad el chiringuito se ha convertido de un partido nuevo en un partido más pepero que el PP y más psoeísta que el PSOE. Lo bueno es que poco al poco, el público se va dado cuenta. Tanto el número de afiliados como la valoración de la Divina van cuesta abajo. Incluso en los foros de política se nota: si antes había varios trolls copiando y pegando "el mensaje de Rosa Díez", hoy en día nos estamos quedando sin. Parece que por fin las cibercabras le están haciendo caso al Gorri.

Juan Espino | 15 de febrero de 2010, 14:25

Hola Rocío, ¿te valdría como situación post-congresual?:

"No tengo el cuerpo pa ná"

Anónimo, será que es verdad eso de que cada cerdo tiene su San Martín.