Más piropos desde el Consejo de Dirección

Más piropos desde el Consejo de Dirección

Como deberías haber previsto, tu nueva circular porque tiene tu redacción, se ha hecho pública para todo aquel que quiera leerla y voy a realizar tres aclaraciones sobre los juicios de valor que en ella viertes y afectan a mi persona. Vallamos a los textos:

• "... sí conocíamos la voluntad de los expedientados de hacer todo lo posible para impedir que celebremos en paz nuestro Congreso." ¿Cuando hemos manifestado nosotros, como colectivo, que nuestra voluntad sea la de impedir nuestro Congreso? Sí, nuestro porque es de todos, pese a tus declaraciones radiofónicas de julio, en la que ya nos dabas como fuera del partido aunque muchos de los expedientados ni habíamos entregado aún las alegaciones. La sentencia, tu sentencia , ya estaba tomada. Lo único que habíamos manifestado era nuestra disconformidad con los derroteros que estaba tomando el futuro de UPyD, bajo tu autoritaria gestión, hacia un sistema, en nuestra opinión, caudillista, ni siquiera presidencialista, alejado de los principios fundacionales que, hablando por mí, sí conozco.


• "Estamos absolutamente decididos a defender el buen nombre de nuestro partido donde sea necesario, ..." ¿Pretendes echarnos encima a la afiliación con es subterfugio de polemista de tertulia de cafetín? Como ya hice con tu amigo Manuel Hernández Iglesias –que por cierto no ha tenido la hombría de bien suficiente para respaldar sus acusaciones, lo siento por él– te desafío, ya que como él, te sientes hombre para lanzar acusaciones, a que también los seas para aportar prueba alguna de que yo haya atacado el buen nombre del partido. ¿No será que, al contrario de lo que pretendes achacarme, hayas sido tú, quién con actuaciones tan arbitrarias ha perjudicado el buen nombre de UPyD? ¿Acaso tienes declaraciones nuestras, mías, atacando el proyecto de UPyD? Evidentemente, UPyD tiene un problema, un gravísimo problema, que por supuesto no radica en unos insignificantes crítico en muy determinadas cosas, como nosotros, ese problema se llama Carlos Martínez Gorriarán, para ser justo, la muy peculiar forma en que Carlos Martínez Gorriarán entiende esa "otra forma de hacer política", o de ser "un partido distinto" que tanto pregonamos.

Me recuerdas a Jordi Pujoll cuando se tiraba de la manta en el escándalo de Banca Catalana, él tocaba a rebato a las masas nacionalistas al torticero grito de "están atacando a Cataluña" cuando en realidad lo único que se pretendía es que él hiciera frente a sus responsabilidades; creo que lo hemos hablado en alguna sobremesa. Pues lamento decirlo, pero no tienes el menor pudor en actuar igual que el "muy honorable". Aquí puedes esconderte en el Consejo Político, por aquello de lo "colegiado" pero si te queda algo de vergüenza, no te escondas tras el partido, no te enroques con UPyD, porque lo único que haces con ello, es perjudicarlo más. Precisamente, nuestras discrepancias o críticas, son por defender el proyecto original de UPyD. Es eso y no otra cosa lo que nos hace estar aquí soportando tus insultos y arbitrariedades, en vez de darte la patada en el trasero que es lo que pienso que te mereces.


• "Esta limpieza, libertad y claridad son, precisamente, los valores que ofenden a nuestros enemigos, sean cuales sean las excusas peregrinas que esgriman para atacarnos." Carlos, opino –y creo no ser el único– que tu escalada de descalificaciones conforme pasa el tiempo, sólo es equivalente a tu progresiva pérdida del Norte. Alguien –y por encima de ti, solo está Rosa– debería cortar de raíz tanta bilis vocal que esa sí perjudica –y mucho– al partido, al proyecto de todos. No ha pasado tanto tiempo desde pudimos oír a Rosa decir frecuentemente: "enemigos son los de ETA, los demás son adversarios". Ahora, por decisión ex catedra de don Carlos, sus propios compañeros, aunque herejes, hemos pasado a la categoría de los terroristas. Un escalón más en la pérdida del Norte ¿Se nos obligará en el futuro, si la Justicia no lo impide, a portar, cosida a nuestras espaldas, unas estrellas amarillas de seis puntas?

No, Carlos, no confundas al personal, si en UPyD existiera esa limpieza, libertad y claridad (observo que ya evitas pronunciar conceptos tan peligrosos como democracia interna y transparencia), posiblemente estaríamos hablando ahora de las enmiendas (nuestras y de otros), pero no depende de nosotros. Bien os habéis ocupado de impedirlo.

Para finalizar, seguro que a la juez del caso le encantará leer un simple punto de nuestro Programa Electoral para las Generales de 2008:

15º Democratización interna de los partidos, instaurando la obligatoriedad de la elección directa por los afiliados, o elecciones primarias, de los candidatos a los principales puestos de responsabilidad política. Asimismo se reforzará la protección judicial de los afiliados frente a expulsiones arbitrarias.

Y esto ya no es un brindis al sol, como cuando alguno dice "esto no volverá a pasar". Esto es un compromiso electoral nuestro, no a la manera del "Viejo profesor" que decía que "las promesa electorales estaban para incumplirlas". Para UPyD, y bien convencido que lo decíamos, era un contrato con la sociedad, vamos que lo íbamos a cumplir. ¿Y así, expulsándonos para impedir que los "herejes" acudamos al Congreso con nuestras propuestas, es como pensáis tú y Rosa cumplirlo?

¿Y los que quieren hundir al partido somos nosotros? ¡Por favor!